De la autora y sobre el mismo tema, hemos publicado en años anteriores: Personas en situación de calle en la ciudad de Buenos Aires. 2016-2021. Empobrecimiento y vulnerabilidad, y Familias en situación de calle. Ciudad de Buenos Aires, 2022-2023.
El objetivo de este artículo es describir las políticas implementadas para las personas en situación de calle desde el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El período de análisis es el lapso 2023-2025, ya que propongo que a partir del ascenso del Jorge Macri como Jefe de Gobierno se consolida una nueva perspectiva sobre las personas en situación de calle que cristaliza en acciones de criminalización, represión y expulsión de quienes pernoctan en el espacio público.
Defino la situación de calle según la Ley 3706/10, que incluye en dicha condición a las personas solas o grupos familiares que habiten en el espacio público en forma transitoria o permanente, utilicen o no la red de alojamiento nocturno (Boletín oficial N° 3680, 2011). Por otro lado, tomo la noción de política pública de Salazar Vargas, que la define como un conjunto de acciones destinadas a tratar una problemática específica (2012).
De acuerdo con dicho criterio, existe un grupo de políticas y normas enmarcadas en la 3706/10, orientadas a la atención socioasistencial de quienes viven en la calle. En términos habitacionales consiste en una red de centros de inclusión social (CIS) destinados a varones, mujeres o grupos familiares, personas con adicciones, problemas psiquiátricos o con alguna discapacidad. A partir del llamado a la línea 108, el Gobierno actúa a través de la Red de Atención y los deriva a algunos de los CIS dispuestos en la Ciudad.
Actualmente existen cerca de 48 CIS, algunos de los cuales son administrados directamente por el Gobierno de la Ciudad y otros en convenio con organizaciones de la sociedad civil. Hay Centros de Inclusión Social de ingreso directo, es decir, derivados por la Red de Atención desde la situación de calle y otros por derivación, es decir, luego de haber pasado por una serie de entrevistas que resuelven la entrada a algún CIS. Antes se los llamaba paradores y hogares, los primeros dedicados a pasar la noche y los segundos con mayor tiempo de permanencia. En la actualidad todos son CIS. Se espera de ellos que den atención física y psicológica a quienes asisten, que brinden orientación en cuanto a subsidios y pensiones y acompañamiento en la elaboración de un proyecto de vida que permita salir de la situación de calle.
(…) el Gobierno de la Ciudad otorga un subsidio habitacional que consiste en un monto mensual para alquilar un albergue, durante seis meses, renovable. Por su monto, el subsidio sólo alcanza para abonar una habitación de hotel.
A continuación, acompaño un mapa con la distribución de los CIS en el año 2023. Como puede verse la mayoría de ellos está ubicado en la zona sur de la ciudad de Buenos Aires, especialmente en las comunas 1 y 4.

Mapa de los CIS. Fuente: Elaborado por Santiago Petrocelli, con base en los datos oficiales del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (2017-2023)
(…) desde fines de 2023 surgieron una serie de medidas represivas destinadas a quienes duermen en el espacio público, que anclan en un diagnóstico diferente sobre el perfil de quienes habitan la calle y sobre las causas del problema.
Además de los Centros de Inclusión Social, el Gobierno de la Ciudad otorga un subsidio habitacional que consiste en un monto mensual para alquilar un albergue, durante seis meses, renovable. Por su monto, el subsidio sólo alcanza para abonar una habitación de hotel. Se accede a él luego de haber acompañado la documentación probatoria, tal como un informe redactado por un trabajador social, entre otros. Además del subsidio habitacional, las personas o familias pueden presentar un amparo judicial para que el Gobierno de la Ciudad les otorgue una solución habitacional definitiva. Por otro lado, pueden acceder a la tarjeta Ciudadanía Porteña para comprar alimentos y productos de higiene.
Esta política ligada a la atención socio habitacional surgió en 1997 con el Programa Sin Techo y se mantiene hasta hoy con modificaciones periódicas sobre temas específicos.
Pero además de este grupo de acciones dirigidas a la asistencia social y habitacional, desde fines de 2023 surgieron una serie de medidas represivas destinadas a quienes duermen en el espacio público, que anclan en un diagnóstico diferente sobre el perfil de quienes habitan la calle y sobre las causas del problema.
Tal como enunciaba el Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: “Dentro del universo de quienes viven en la calle se puede distinguir entre emergentes, crónicos y peligrosos” (Jorge Macri, Buenos Aires noticias, 2024). Si bien las dos primeras categorías tienen larga data en los estudios socio urbanos y en las políticas públicas, la denominación de “peligrosos” es nueva en el abordaje de la problemática y propone un tratamiento delictivo de la cuestión. A partir de un caso de homicidio por parte de una persona que vivía en la calle, se extendió el diagnóstico hacia toda la población y se penalizó el problema.
A partir de allí se implementaron una serie de medidas dirigidas a desocupar las calles agrupadas bajo el operativo “Orden y limpieza” que consistieron en desalojar a quienes pernoctan en el espacio urbano y arrojar sus pertenencias a la basura. Las fotos de Jorge Macri mostrando barrios con un “Antes y ahora” expresaron de modo muy claro la perspectiva de orden y limpieza que adquirió la problemática.
Esta mirada ancla en la necesidad de preservar el bienestar del vecino porteño que se siente inseguro ante las personas en situación de calle: ‘levantar un poco la vara y recuperar ese afuera para el vecino, porque mucha gente se siente insegura’

Foto “Antes y Ahora”. Fuente: Diario La Nación, 25/4/2024
Junto con el Jefe de Gobierno, el ex Ministro de Seguridad de la Ciudad seguía esta misma perspectiva: “Si una persona tiene un colchón en la calle, se le saca el colchón y sus pertenencias y se tiene que ir. No puede dormir en la calle. En el procedimiento se les sacan las cosas pero eso es previo a invitarlo a que se traslade a un centro de inclusión social, a donde también se trasladan sus pertenencias. Lo que no vamos a permitir es que duerman en la calle. Primero porque está mal y segundo porque es peligroso para todos” (Waldo Wolff, 2024).
Esta mirada ancla en la necesidad de preservar el bienestar del vecino porteño que se siente inseguro ante las personas en situación de calle: “levantar un poco la vara y recuperar ese afuera para el vecino, porque mucha gente se siente insegura” (Macri, 2023).
Este punto de vista sobre el perfil de quienes viven en la calle se acompaña de un diagnóstico de la problemática que ubica las causas en tres aspectos: las adicciones, los problemas psiquiátricos, la falta de vínculos familiares y la recepción de gente que viene diariamente de la provincia de Buenos Aires. A pesar de que el Relevamiento de Personas en situación de calle (REPSIC) en 2024, mostró que un 35% de personas nació en la ciudad de Buenos Aires (IDECBA, 2025), se sostiene reiteradamente que el problema surge porque “vienen de la provincia” o “entran a la ciudad”. Esta afirmación no sólo desconoce que existe un gran número de personas nacidas en CABA, sino la necesidad de abordar el fenómeno a escala del Área Metropolitana de Buenos Aires, como es usual en varios de los fenómenos urbanos y socio urbanos que aquejan a la Ciudad. Por otro lado, poner el centro en las adicciones o los problemas psiquiátricos, es dejar de lado los asuntos económicos y sociales que rodean a quienes viven en la calle: la falta de trabajo, la imposibilidad de acceder a un alojamiento por falta de ingresos, los desalojos, la pobreza crónica, la insuficiencia del monto del subsidio habitacional para acceder a un cuarto de hotel, el constante circuito entre el hotel, el centro de inclusión y la calle.
Se ponen en marcha operativos de expulsión, represión y limpieza que corren a los pobres de los lugares centrales del espacio público y los trata de ‘peligrosos’ o ‘fisuras’
En síntesis
En la ciudad de Buenos Aires, la situación de calle es abordada a través de dos tipos de políticas. La primera surge en 1997 a partir del Programa Sin Techo del Gobierno de la Ciudad y, con cambios, se sostiene hasta la actualidad. Consiste en la contención a través de los centros de inclusión social, atención física, psicológica y acompañamiento en elaboración de un proyecto personal que permita salir de la calle.
Si bien esta política es asistencialista y no resuelve el problema de fondo, que fueron las políticas neoliberales de mediados de la década de 1990, que limitaron el acceso al empleo formal, restringieron el acceso a la vivienda y colocaron a buena parte de la población en condiciones de pobreza crónica, hacia fines de 2023 surge una nueva perspectiva que combina la atención social con la actuación delictiva del problema. Se ponen en marcha operativos de expulsión, represión y limpieza que corren a los pobres de los lugares centrales del espacio público y los trata de “peligrosos” o “fisuras”. Tal como afirma Wacquant (2004), se produce una criminalización de la pobreza que usa el sistema penal y las reglamentaciones represivas para controlar a los pobres, ordenar el espacio público y la vida común, lo que implica un aumento de la vigilancia, el control policial y la judicialización de la cuestión social.
Tal como expresa Carrión, el espacio público es una relación, es decir, no se limita a la dimensión física sino que incluye las dinámicas y vínculos sociales que ocurren dentro de él. (Carrión, 2016) Las políticas basadas en la expulsión no sólo no resuelven los problemas sino que limitan una de las funciones del espacio público que es el encuentro de la diversidad, no sólo porque se precariza y tuguriza la calidad del espacio físico, sino porque se hace foco en la amenaza y la peligrosidad que representa el “otro” y no se implementan medidas que contribuyan a la alteridad.
VP
La autora es Licenciada en Sociología y Doctora en Ciencias Sociales (UBA). Docente e Investigadora de la FADU-UBA y del CONICET. Titular de la materia “Sociología Urbana” en FADU-UBA.
Ver sus informes de años anteriores: Personas en situación de calle en la ciudad de Buenos Aires. 2016-2021. Empobrecimiento y vulnerabilidad, y Familias en situación de calle. Ciudad de Buenos Aires, 2022-2023.
Bibliografía
Boletín Oficial (2011) Ley 3706 de protección y garantía de los derechos de las personas en situación de calle y en riesgo de situación de calle, sancionada en 2010, publicada el 8/6/2011.
Carrión, Fernando (2016) “El espacio público es una relación, no un espacio” en
IDECBA (2024) “Relevamiento de personas en situación de calle. Ciudad de Buenos Aires, 2024. Informe de resultados 1931”.
Noticias Urbanas (2024) “El objetivo es que nadie duerma en la calle”.
Página 12 (2023) “Jorge Macri eligió a las personas en situación de calle como su peor enemigo” en Página 12, 1/6/2023.
Ramírez Curi, Patricia (coord.) La reinvención del espacio público en la ciudad fragmentada, Universidad Nacional Autónoma de México, pp. 13-47.
Salazar Vargas, Carlos (2012), Bien Común 18, pp 47-52.
Wacquant, Loic. (2004). Las cárceles de la miseria. Buenos Aires, Manantial.
Wolff, Waldo (2024) “Waldo Wolff defendió los operativos del Gobierno porteño con personas en situación de calle”, en El Intransigente.com