N. de la R.: El texto de esta nota reseña el libro Plataformas digitales en la ciudad. Transformación y rediseño del espacio urbano y la vida cotidiana, de Susana Finquelievich, Belén Odena, Ulises Girolimo, Martin Gendler, Patricio Feldman y Sebastián Cortez Oviedo, publicado por café de las ciudades en este mes de febrero de 2024. Ya está disponible.
El proceso de plataformización impacta directa e indirectamente en la conformación de la teleciudad, así como en la reconformación del espacio público urbano, tanto en sus usos y apropiaciones sociales como en los equipamientos colectivos, públicos y privados. Las plataformas que inciden son diversas, y su uso es simultáneo por parte de los consumidores, devenidos prosumidores. El ensamble de tecnologías, herramientas y produsuarios configuran un nuevo entorno de los espacios públicos, en tanto idea, espacio y lugar en la ciudad. Entendemos como impactos urbanos a las transformaciones tangibles o intangibles producidas por un factor o proceso en el espacio físico urbano, su uso por los habitantes o visitantes, los usos sociales de la ciudad, las prácticas sociales, las infraestructuras y equipamientos colectivos, públicos y privados.
Las plataformas de geolocalización y de entretenimiento y ocio son estructurantes del fenómeno creciente de mediatización urbana. La intermediación de las tecnologías digitales en la experiencia de la ciudad (a partir de dispositivos digitales y pantallas, conexiones de bits, obsolescencia programada y sesgos algorítmicos) configura una nueva capa de análisis en los estudios urbanos. Las apps de geolocalización, como Waze, son parte de nuestra vida cotidiana. Nos consiguen transporte, nos guían a destinos desconocidos, nos indican zonas seguras, el camino más corto, el estado del tráfico, incendios, atascos y factores climáticos en tiempo real. Colaboran en expandir nuestra información del territorio, la geografía y los flujos urbanos. Algunas nos permiten recorrer lugares a partir de cámaras 360, identificar locales y comercios, sitios históricos y un sinnúmero de datos urbanos a partir de la Realidad Aumentada. Se transforman en un complemento de nuestros ojos, oídos y pies; actúan como nuestras prótesis.
Las plataformas digitales juegan un doble rol en lo urbano: por un lado, mediatizan experiencias ciberfísicas entre las personas y la geografía, inciden en la manera de apropiarse de un espacio, y lugarizan zonas de la ciudad a través de discursos comunicacionales, algoritmos y tecnologías inmersivas (RA, RV, RM); por el otro, median entre los urbanitas y el habitar urbano a partir de la semiótica del consumo comunicacional y digital, expresado en la forma de fotografías, imaginarios sociales, representaciones y un ‘deber ser’ urbano, también articulado por plataformas (redes sociales, juegos, Apps de turismo y valoración de sitios y lugares).
Tanto la mediatización como la mediación de lo urbano expresan uno de los tantos ‘lados B’ o aspectos negativos de la plataformización. En ellas radican gran parte de los debates a nuevas lógicas de acceso y apropiación de los espacios públicos urbanos, donde se manifiestan segregaciones espaciales emergentes producto de las brechas, no solo sociales sino ya digitales y tecno-culturales. La mediatización, así como la mediación urbana devenida de la creciente plataformización, configuran un “derecho intermediado a la ciudad”, cuyo debate acerca del acceso no solo será físico sino ya cultural y digital.
La intermediación de las tecnologías digitales en la experiencia de la ciudad (a partir de dispositivos digitales y pantallas, conexiones de bits, obsolescencia programada y sesgos algorítmicos) configura una nueva capa de análisis en los estudios urbanos.
Las plataformas son un fenómeno esencialmente urbano. Aunque los servicios de las plataformas son digitales, el espacio físico es fundamental para la prestación del servicio. Muchas de las plataformas, como las de reparto, requieren un espacio definible con el mayor número posible de usuarios potenciales de sus servicios (clientes) y proveedores de servicios (trabajadores) y se benefician de la densidad de población en las ciudades y la proximidad espacial de clientes y trabajadores. Las plataformas de alojamiento necesitan de casas, departamentos, preferiblemente cercanos a medios de transporte, zonas turísticas y equipamientos colectivos. Además de la densidad urbana y el uso de las infraestructuras disponibles, la formación de una capa digital en las ciudades, la especialización socioeconómica que se materializa en mercados urbanos robustos, la proximidad espacial y la inserción de las ciudades en los procesos de internacionalización productiva constituyen factores que favorecen y alimentan el desarrollo del ecosistema de plataformas
Las plataformas funcionan como intermediarias entre los productores de bienes y los consumidores/clientes, a través de distribuidores. Los clientes seleccionan los bienes digitalmente a través de la interfaz comercial de la plataforma, los bienes son preparados por empresas del sector privado y entregados a través de distribuidores normalmente independientes. La participación de las autoridades públicas es mínima, aparte de la necesidad de que productores y distribuidores cumplan normativas y políticas específicas. Para las plataformas, la ciudad es clave debido a la economía espacial de agregación y densidad urbana que hace que la intermediación productor-consumidor en línea o fuera de línea funcione, tanto desde una perspectiva comercial como del usuario. La ciudad proporciona la densidad (de consumidores, proveedores, demanda y datos digitales y de mercado) que confiere a estas plataformas su lógica urbana.
Los ejemplos de la necesidad que tienen las plataformas de infraestructuras y equipamientos urbanos analógicos son numerosos: desde las oficinas de correos donde los usuarios pueden retirar sus productos, los comercios a pequeña escala como los restaurantes, los supermercados y las cadenas de librerías hasta los espacios cubiertos y descubiertos donde se reúnen los ciclistas y motoristas de reparto para esperar un nuevo pedido, pasando por las zonas de estacionamiento en aeropuertos, estaciones de tren, de ómnibus y terminales de barcos que los conductores de Uber o Cabify utilizan como puntos de recogida de pasajeros. Estos espacios urbanos ya existentes se convierten en bases indispensables para las prácticas de plataformas. Estas no podrían existir y producir ganancias sin los equipamientos urbanos y los espacios producidos por el urbanismo de los siglos y décadas anteriores.
Muchas de las plataformas, como las de reparto, requieren un espacio definible con el mayor número posible de usuarios potenciales de sus servicios (clientes) y proveedores de servicios (trabajadores)
En la ciudad de Buenos Aires actual, los transportes tipo Uber, Didi o Cabify y la micromovilidad alteran físicamente el paisaje urbano: existen alrededor de 300 kilómetros de bicisendas y unas 400 estaciones de Ecobicis. También contribuirían a la disminución de las congestiones vehiculares y a la disminución de la contaminación urbana. Originan transformaciones en el transporte urbano, la circulación y la utilización del espacio. Junto con el e-comercio y el reparto de mercaderías, causan cambios en los comportamientos de desplazamiento de los consumidores.
Por otro lado, también es necesario considerar la necesidad de amplios espacios de almacenamiento de mercaderías para su posterior distribución, primero en camiones o camionetas hacia centros de reparto y luego en bicicletas o motos hacia sus destinos finales, lo que implica el establecimiento de centros o hubs de reparto.
Todos estos factores necesitan ser relevados y mensurados para poder evaluar los impactos reales (no solo supuestos) de las plataformas digitales sobre el espacio físico y social urbano. Sin embargo, puede percibirse ya un cambio de paradigma; las personas ya no van a las cosas sino que las cosas van a las personas.
¿Qué plataformas digitales están presentes en las ciudades argentinas? ¿Qué particularidades tiene el proceso de plataformización? ¿Qué impactos tiene el uso de plataformas digitales en el entorno construido urbano y en el uso social del espacio y el territorio? ¿Cómo se reflejan los procesos de plataformización en las políticas urbanas locales y a su vez, cómo influyen éstas en esos procesos? ¿Qué indicadores sociales, económicos, ambientales permitirían medir, cuantitativa y/o cuantitativamente, las transformaciones urbanas que acarrean, sus impactos sociourbanos?
La ciudad proporciona la densidad (de consumidores, proveedores, demanda y datos digitales y de mercado) que confiere a estas plataformas su lógica urbana.
Las plataformas digitales ofrecen a los consumidores la oportunidad de interactuar con los proveedores de bienes y servicios a través de Internet. Han transformado drásticamente las actividades de intercambio, así como la naturaleza del trabajo. Las transformaciones en la vida cotidiana causadas por la pandemia de Covid-19 han utilizado en gran parte a las plataformas para permitir a las personas enfrentar los inconvenientes y limitaciones causados por las cuarentenas, e inclusive generar nuevos bienes y servicios en algunos sectores, como el transporte, la distribución de productos, la alimentación, el alojamiento y las industrias culturales y recreativas. Estas plataformas prestan servicios de intermediación y a veces servicios financieros, implícita o explícitamente.
Junto con el e-comercio y el reparto de mercaderías, causan cambios en los comportamientos de desplazamiento de los consumidores.
Este libro se focaliza entre otros campos sobre las características de los procesos de plataformización vinculados al comercio electrónico, el transporte, la micromovilidad, el turismo y el trabajo de reparto o delivery, y sus consecuencias sobre el espacio público y privado urbano, el uso del tiempo social y los nuevos hábitos de los urbanitas. Examina las maneras en que el uso de las plataformas modifica el uso del espacio urbano, las formas de residencia, el turismo, las apropiaciones sociales del espacio público y la vida urbana cotidiana, analizando los factores positivos y negativos del llamado “Urbanismo de plataformas”. Se aventura en los principales debates teóricos que se desarrollan en la intersección de las investigaciones económicas, los estudios urbanos y la economía digital, y analiza ejemplos a partir de los cuales se reflexiona sobre las múltiples formas en las que las plataformas presentan, por un lado, un potencial de renovación de la vida urbana (y de la posible tendencia a la desconcentración de las ciudades, particularmente de las áreas centrales) y por otro, el aún poco explorado “lado B” de este fenómeno.
¿Qué impactos tiene el uso de plataformas digitales en el entorno construido urbano y en el uso social del espacio y el territorio? ¿Cómo se reflejan los procesos de plataformización en las políticas urbanas locales y a su vez, cómo influyen éstas en esos procesos?
La investigación esta reforzada por una encuesta en línea a los usuarios de plataformas, lo cual aporta información de primera mano sobre un tema que hasta ahora se ha considerado “de vacancia”. Se han tomado los casos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y la ciudad de Córdoba como objetos de investigación. Las informaciones y reflexiones sobre ambas ciudades se presentan transversalmente a lo largo del trabajo.
¿Cómo medir los impactos socio urbanos de la llamada “sociedad de las plataformas? ¿De qué manera mensurar tanto los factores cuantitativos como los cualitativos? Una exploración extensiva de la bibliografía especializada muestra que ésta es actualmente un área de vacancia en el urbanismo y las ciencias sociales. Este libro aporta la propuesta de una metodología de construcción de indicadores sobre la emergencia de los procesos de plataformización y sus impactos sobre las ciudades.
SF, BO, UG, MG, PF y SCO
Susana Finquelievich, Belén Odena, Ulises Girolimo, Martin Gendler, Patricio Feldman y Sebastián Cortez Oviedo, 2024. Plataformas digitales en la ciudad. Transformación y rediseño del espacio urbano y la vida cotidiana. Buenos Aires, café de las ciudades.
Susana Finquelievich (Argentina) es Arquitecta, Postgrado en Planificación Urbana y Regional (Universidad Tecnológica de Pomerania Occidental de Sczczecin, Polonia), Master en Urbanismo (Université Paris VIII), Doctora en Sociología Urbana (École des Hautes Études en Sciences Sociales, París). Investigadora Principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICET). Co-Directora del Programa de Investigaciones sobre la Sociedad de la Información, Instituto de Investigaciones Gino Germani, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Buenos Aires (UBA). Directora del equipo de investigación I-Polis. Docente en la Maestría de Comunicación Digital de la Pontificia Universidad Bolivariana de Medellín, Colombia, en el Instituto Ortega y Gasset, Madrid, en el Doctorado en Ciencias Sociales de la UBA y en la Maestría de Derecho Informático de la UBA. Autora y coautora de 21 libros sobre Sociedades del Conocimiento.
María Belén Odena (Argentina) es Licenciada en Psicología (UBA). Maestranda en Ciencias Sociales del Trabajo y doctoranda en Ciencias Sociales (UBA). Becaria doctoral de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT). Su línea de investigación actual se focaliza sobre los impactos psicosociales de las tecnologías 4.0 en los trabajadores del sector informático.
Ulises Girolimo (Argentina) es Licenciado en Ciencia Política por la Universidad Nacional de Rosario y Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires. Becario postdoctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Se desempeña como investigador en el Programa de Investigaciones sobre la Sociedad de la Información, en el Instituto de Investigaciones Gino Germani (FSOC-UBA). Es docente en el Departamento de Economía, Producción e Innovación Tecnológica de la Universidad Nacional de José C. Paz (UNPAZ), y en la Facultad de Ciencias Sociales de la Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA). Sus temas de interés son los procesos de innovación socio-tecnológica en sectores intensivos en conocimiento en ciudades de Argentina.
Martin Ariel Gendler (Argentina) es Doctor en Ciencias Sociales, Licenciado y profesor en Sociología por la Universidad de Buenos Aires (UBA), diplomado superior en Gobernanza de Internet (Universidad de San Andrés-Universidad Federal de Rio Grande do Sul). Becario posdoctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet). Integra el Programa de Estudios sobre la Sociedad de la información del Instituto de Investigaciones Gino Germani (IIGG). Es docente universitario de grado en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA y en la Universidad Nacional de José C. Paz, y en posgrado en la Universidad Nacional de Tres de Febrero. Ha impartido cursos de doctorado en la Universidad Nacional de Rosario, la Universidad Nacional de Entre Ríos y la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales.
Patricio Feldman (Argentina) es Doctor en Ciencias Sociales, Licenciado en Ciencia Política, y Magíster en Procesos de Integración Regional por la Universidad de Buenos Aires (UBA). Es investigador asistente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET) y miembro investigador en el Instituto de Investigaciones Gino Germani de la UBA en temas referidos a las políticas públicas de innovación socio-tecnológica en ciudades, redes multiactorales y desarrollo local, educación y TIC, entre otros tópicos que conciernen a las SC. Es docente titular de Economía Internacional en la Universidad del Salvador (USAL) y docente del seminario “Sociedad del Conocimiento y Cultura digital” en la Maestría de Comunicación Digital de la Universidad Pontificia Bolivariana (UPB).
Sebastián Cortez Oviedo (Argentina) es Doctor por la Universidad Nacional de Córdoba, especialista en espacios públicos y mediatización urbana. Su trabajo indaga en los procesos de transformación digital urbana y sus dinámicas de mediatización socioespacial. Becario de Investigación posdoctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET). Investigador del Equipo I-Polis del Instituto Gino Germani de la Universidad de Buenos Aires. Investigador Asociado permanente del Núcleo Inteligencia artificial, Sociedad y Comunicación de la Universidad de Chile. Miembro del INVIHAB IDH-CONICET. Profesor de grado y posgrado de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Córdoba.
Ver la reseña de Federico Poore en Cenital.
Libro en formato digital disponible para su compra
en la Tienda del Café de las Ciudades:
* Compras desde fuera de Argentina