Entre las décadas de 1950 y 1970 se desarrollaron con diversa suerte en Argentina una serie de Ciudades Universitarias. La matriz ideológica de esa forma de resolver las implantaciones académicas en la ciudad es algo difusa, como suele ocurrir con estas decisiones urbanas, pero en general oscila entre el prestigio tecnocrático del zoning y la separación de funciones, por un lado, y la idea reaccionaria de concentrar y aislar a los estudiantes en lugares alejados de los centros urbanos, a fin de dificultar su participación en manifestaciones y protestas políticas. En un caso particular, el de Tucumán, hubo otra intención muy propia de la tradición vanguardista de la arquitectura moderna: el ensayo de un modelo alternativo de ciudad.
Los resultados han sido, en la mayoría de los casos, decepcionantes. Ghettos aislados de la ciudad, de difícil accesibilidad, desconectados de sus entornos, con una concepción del espacio público como vacío. En una de sus Terquedades, Mario L. Tercco habló de la “no-Ciudad Universitaria” porteña, concepto que resume los defectos del más fallido de los ejemplos argentinos en la materia.
Resulta entonces muy apropiada la decisión de la Universidad Nacional de Córdoba (que en estos días ha celebrado sus 400 años de existencia) de implementar un Plan de Reordenamiento Territorial y Espacio Público para su Ciudad Universitaria. Más allá de los méritos del plan y de las dificultades que puedan surgir en su implementación, el acierto del Consejo Superior cordobés está en la voluntad de intervenir con sentido proactivo para mejorar su campus tanto “hacia adentro” como “hacia afuera” (tanto en la resolución urbana de sus espacios y edificios como en la integración de la Ciudad Universitaria con la Ciudad a secas…).
Por cierto, la Ciudad Universitaria cordobesa tiene algunas “fortalezas y oportunidades” frente a otros casos argentinos. La más notoria, su ubicación privilegiada dentro de la ciudad, a menos de dos kilómetros del centro histórico, adyacente al Parque Sarmiento (el más importante de la capital cordobesa), a los equipamientos culturales más prestigiosos y al vibrante barrio de Nueva Córdoba, que alberga buena parte de la población estudiantil de la UNC. El verde público de la Ciudad Universitaria funciona en la práctica como el “patio” de la alta densidad residencial de Nueva Córdoba; ambas piezas urbanas funcionan de manera integrada. La reciente demolición de la Casa de las Tejas, con toda su carga de irracionalidad técnica y su irregularidad administrativa, permitió sin embargo la concreción de un parque muy rápidamente apropiado por muchos sectores de la comunidad cordobesa, y no solamente la universitaria. Y una visita a la Ciudad Universitaria en días feriados o de fin de semana permite comprobar hasta qué punto el “territorio universitario” funciona como expansión y complemento del Parque Sarmiento para usos recreativos y deportivos.
Este contexto facilita la misión más importante de cualquier plan que pueda imaginarse para el sitio: convertirlo en una pieza reconocible de la ciudad, un barrio o, como en este caso se postula, un parque universitario que permita la continuidad legible de la ciudad. No es casual que el documento de presentación del Plan contenga una buena cantidad de referencias que remiten a los criterios de Kevin Lynch en La imagen de la ciudad.
Aquí me permito una incursión en un campo que me es ajeno. Como en todo discurso, la jerga urbanística tiene sus trampas y contradicciones; hablar de Ciudad Universitaria implica la idea de un “precinto” aislado e incontaminado respecto a la ciudad. En el propio nombre ya están implícitos los cercos perimetrales, las colecciones de edificios desparramados sobre un vacío inexpresivo, las dificultades de acceso, la ausencia de lugares significativos, el espacio sin calidad, los parcelamientos. La verdadera ciudad universitaria es la ciudad. Aquella que alberga a la universidad en su propio tejido, en sus barrios universitarios… Aquella que aprovecha el plus de animación, rebeldía y conocimiento que la implantación universitaria le da a la vida urbana. Eso es lo que puede ser el campus cordobés; eso que tan bien describió Louis Kahn: “lo que el espacio quiere ser”.
El plan, desarrollado por un equipo de trabajo de la UNC coordinado por el Arq. Mariano Faraci, se propone organizar el territorio de la Ciudad Universitaria “para preservarlo como parque educativo y cultural”, planteando entre otros objetivos continuar con las acciones de los últimos años para recuperar la calidad del espacio público y el soporte natural verde y definir las relaciones con la ciudad a partir de la resolución de bordes, límites y accesos. A tal efecto se organiza el predio con un criterio de sistemas, a partir de una estructura de movilidad que privilegia la peatonalidad, la bicicleta, las “calles de convivencia” y el transporte público por sobre el automóvil privado. Esta trama define ocho macromanzanas, “unidades espaciales cuya identidad surge de la articulación d las propiedades del lugar y los tipos de usos”. Al interior de las macromanzanas se procura integrar los espacios interiores institucionales con los espacios públicos exteriores (el caso emblemático es el Patio de las Palmeras del Pabellón Argentina, corazón del sistema), “consiguiendo espacios continuos, cualificándolos con los equipamientos y requerimientos necesarios”.
El plan procura además la resolución paisajística y espacial de los bordes y la optimización de los accesos y conectividades. Propone también “praderas provisorias” en áreas de reserva para usos específicos. Para sistematizar requerimientos de servicios al interior de las macromanzanas, se proponen edificios multipropósito, con estacionamientos en subsuelo, locales comerciales y gastronómicos en las plantas bajas y aulas y salas comunes en las plantas altas; su financiamiento puede provenir de convenios con concesionarios privados.
De todos modos, el principal obstáculo para el plan no consiste en sus requerimientos presupuestarios ni en los problemas “limítrofes” con vecinos como la UTN, sino en los riesgos de una cultura administrativa y de gestión poco afecta a las previsiones del planeamiento. “Lo más importante entonces es que este plan pueda ser claramente explicitado, consensuado y monitoreado, para transformarlo en una política permanente que trascienda a esta gestión en particular. Y que pueda ser corregido a tiempo en los temas insuficientemente abordados tanto por modificaciones en las demandas y/o prioridades cómo por factores externos que devienen de tensiones urbanas producto de la inserción real en una ciudad compleja y en incesante mutación”.
MC c/ CIP
Carola Inés Posic es comunicadora especializada en temas urbanos. Es corresponsal en Córdoba de café de las ciudades.
Plan de Reordenamiento Territorial y Espacio Público – Ciudad Universitaria. Mariano Faraci. Universidad Nacional de Córdoba, 2013, Córdoba, 1ª edición. 86 pag. 21 x 15 cm. ISBN 978-950-33-1031-1
Una versión preliminar de la publicación está disponible en la Web de la UNC.
Equipo de trabajo:
Coordinador:
Arq. Mariano Faraci
Integrantes:
Mgter. Ing. Civil Alejandro G. Baruzzi (especialista en vialidad y tránsito)
Arq. Pedro Rapalo (especialista en proyecto arquitectónico)
Ing. Agr. Gustavo Re (especialista en paisaje)
Esp. Biólogo Gustavo Reati (especialista en impacto ambiental)
Arq. Mario Ubino (Director de Estudio, Programa y Proyecto. Subsecretaría de Planeamiento Físico)
Asesores:
Mgter. Arq. Teresita Álvarez (asesoramiento en gestión ambiental del desarrollo urbano)
Arq. Stella Césere (asesoramiento en paisaje)
Arq. Alejandro Cohen (asesoramiento en proyecto urbano)
Mgter. Ing. Civil Jorge Galarraga (asesoramiento en transporte y tránsito)
Dra. en Biología Liliana Martín (asesoramiento en impacto ambiental)
Mgter. Ing. Edgardo Masciarelli (asesoramiento en transporte y transito)
Sobre las ciudades universitarias de Buenos Aires y Tucumán, ver también en café de las ciudades:
Número 90 | Terquedades
Una mirada arrabalera a Buenos Aires | Terquedad de la no-Ciudad Universitaria | Mario L. Tercco
Número 127-128 I Arquitectura de las ciudades
Ultima charla con Vivanco I Salvaje, y a mucha honra. I Por Luis Elio Caporossi
Y sobre la demolición de la Casa de las Tejas:
Número 100 | Planes y Política de las ciudades
La insoportable levedad del hacer | La demolición de la Casa de las Tejas en Córdoba | Celina Caporossi
POSICiones anteriores:
Ver la presentación del número 104 y las notas:
Número 127-128 I POSICiones cordobesas:
Planificar desde la inserción global I I Mundos Paralelos II. I Por Celina Caporossi c/Carola Inés Posic
Número 126 I POSICiones cordobesas
Mundos Paralelos ILa comparación entre Australia y Argentina, entre la ficción y la realidad. IPor Celina Caporossi c/Carola Inés Posic
Número 125 I POSICiones cordobesas:
Los Barrios Parques tradicionales I ¿Decadencia o renovación? I Por Carola Inés Posic
Número 124 I POSICiones cordobesas
Tres ideas para Río Ceballos I Hacia la conformación de una Ciudad Parque. Por Celina Caporossi y Fernando Díaz Terreno (Estudio Estrategias)
Número 122-123 I POSICiones cordobesas
Después del apocalipsis… I ¿Puede el arte cambiar el mundo? I Por Carola Inés Posic
Número 121 I POSICiones cordobesas
Clorindo Testa y el galponcito argentino I De la tradición popular a la gran arquitectura I Por Celina Caporossi
Número 120 I POSICiones cordobesas
Algunas reflexiones después de la visita de Jordi Borja I Cómo producir ciudad en el nuevo contexto I Por Carola Inés Posic
Número 119 I POSICiones cordobesas:
“Sacar, poner, mantener” I Un balance de las obras en el área del FC Mitre. IPor Carola Inés Posic
Número 118 I POSICiones cordobesas
Las tres Cañadas I Preservar, consolidar y proyectar I Por Celina Caporossi y Marcelo Corti
Número 117 I POSICiones cordobesas
El poder de las palabras I Ciudad y sostenibilidad y Pepe Mujica en el Río + 20 I Por Carola Inés Posic
Número 116 I POSICiones cordobesas
Cerrando Barrios I El debate sobre la normativa que regula los barrios cerrados en Córdoba. I Por Carola Inés Posic
Número 115 I POSICiones cordobesas:
El Parque Tecnológico del Este I Pensar cómo crecer.I Por Carola Inés Posic
Número 114 I POSICiones cordobesas
Sobre la concepción de “lo público” I Una relectura del Diagnóstico para Córdoba de 1973. I Por Carola Inés Posic
Número 113 I POSICiones cordobesas
La sensación de un contrato roto I De ciudades, trenes, tormentas y catástrofes I Por Carola Inés Posic
Número 111/112 I POSICiones cordobesas
Norah Lange, la mirada transversal I O como reunir una biblioteca. I Por Carola Inés Posic
Número 110 I POSICiones cordobesas
Córdoba se va “de caravana” I … y vuelve hecha una urbe latina. I Por Carola Inés Posic
Número 109 I NUEVA SECCION: POSICiones Cordobesas
Renovarse es vivir I Las formas del crecimiento I Por Carola Ines Posic
Número 108 I NUEVA SECCION: POSICiones Cordobesas
¡Es tan difícil poder ver cine! I Habemus Papam y el Director desbordado. I Por Carola Inés Posic
Número 107 I NUEVA SECCION: POSICiones Cordobesas (I)
La paradoja de la conservación I El barco de Teseo encalla en las costas del Suquía I Por Carola Inés Posic
Número 107 I NUEVA SECCION: POSICiones Cordobesas (II)
Patrimonio y después I Miradas desde el sur. I Por Mariana Isabel Bettolli
Número 106 I NUEVA SECCIÓN: POSICiones Cordobesas
Los deseos de Villa El Libertador I Sobre barrios, elecciones y política I Por Carola Inés Posic
Número 105 | NUEVA SECCION – POSICiones Cordobesas
Belgrano de Alberdi: un pirata en primera I Fútbol y Ciudad I Por Carola Inés Posic
Número 104 | Planes y Política de las ciudades
El lugar de todos | Consideraciones sobre el área central de la ciudad de Córdoba | Fernando Díaz Terreno
Número 104 | Arquitectura y Política de las ciudades
Ciudad frágil, Peatonal frágil | Obras en Córdoba: ¿Ensañamiento o ignorancia? | Inés Moisset