Una mirada arrabalera a Buenos Aires

Con el deseo de un muy feliz 2009 a todos los amigos y amigas de café de las ciudades, retomamos la costumbre de presentar el primer número del año con una Ciudad Invisible de Italo Calvino: Zenobia, segunda de “las ciudades tenues”.
Ahora diré de la ciudad de Zenobia que tiene esto de admirable: aunque situada en terreno seco, se levanta sobre altísimos pilotes, y las casas son de bambú y de zinc, con muchas galerías y balcones, situadas a distinta altura, sobre zancos que se superponen unos sobre otros, unidas por escalas de cuerda y veredas suspendidas, coronadas por miradores cubiertos de techos cónicos, cubas de depósitos de agua, veletas, y que proyectan roldanas, sedales y grúas.
No se recuerda que necesidad, orden o deseo impulso a los fundadores de Zenobia a dar esta forma a su ciudad, y por eso no se sabe si quedaron satisfechos con la ciudad tal como hoy la vemos, crecida quizá por superposiciones sucesivas del primero y por siempre indescifrable diseño. Pero lo cierto es que si a quien vive en Zenobia se le pide que describa como vería feliz la vida, es siempre una ciudad como Zenobia la que imagina, con sus pilotes y sus escalas colgantes, una Zenobia quizá totalmente distinta, flameante de estandartes y de cintas, pero obtenida siempre combinando elementos de aquel primer modelo.
Dicho esto, es inútil decidir si ha de clasificarse a Zenobia entre las ciudades felices o entre las infelices. No tiene sentido dividir las ciudades en estas dos especies, sino en otras dos: las que a través de los años y las mutaciones siguen dando su forma a los deseos y aquellas en las que los deseos o bien logran borrar la ciudad o son borrados por ella.
IC y MC (el que atiende)
Otro texto recomendable para empezar el año es La terible sinceridad, una de las Aguafuertes Porteñas de Roberto Arlt que reproducimos en este número. Y otras otras Ciudades Invisibles de Italo Calvino: Dorotea y Ottavia, en los números 27 y 39, respectivamente, de café de las ciudades, y también las referidas en las notas Urbs, Civitas, Polis (número 71), Cinco ciudades continuas (número 43) e Instrucciones para entrar a Buenos Aires (número 29).